Soluciones para la falta de hueso
La falta de uno o más dientes durante largos períodos de tiempo, los tratamientos previos y la propia anatomía del paciente, comporta una pérdida de hueso dental o maxilar. Esta situación también se ve contribuida por traumatismos o cirugías que impliquen la extirpación de tumores. Esta atrofia ósea dificulta la colocación directa del implante por lo que hemos de recurrir a técnicas específicas que nos permitan regenerar y/o recuperar el volumen de hueso perdido.